La localidad fueguina conocida como el “Corazón de la Isla” atravesó una grave situación durante el fin de semana: 48 horas sin energía eléctrica, desde el viernes hasta las últimas horas del domingo. El corte afectó profundamente a vecinos, comercios y prestadores de servicios, provocando pérdidas económicas significativas y dejando en evidencia la falta de infraestructura energética en la zona.
Si bien el servicio fue restablecido hace aproximadamente siete horas, la situación distó de solucionarse, ya que los problemas de suministro continúan y no hay garantías de estabilidad. Comerciantes locales denunciaron la pérdida de productos refrigerados y congelados, mientras que numerosos vecinos expresaron su malestar por la ausencia de respuestas oficiales durante la emergencia.
En este contexto, la bronca se multiplicó cuando el gobernador Gustavo Melella encabezó en Tolhuin el acto por el Día de la Provincia, este domingo 1 de junio, sin hacer mención alguna a la crisis energética que afectaba a la ciudad en ese mismo momento, ni tampoco a la que atraviesa simultáneamente Ushuaia, que también sufre problemas de abastecimiento eléctrico.
Las críticas apuntan a la falta de inversión estructural y de planificación, y a la inacción del Gobierno fueguino frente a una crisis que se repite cada vez con mayor frecuencia. En redes sociales, vecinos hablaron de “abandono”, “desidia” y “falta de respeto”. Por el momento, desde la Dirección Provincial de Energía (DPE) no se emitieron partes oficiales con detalles sobre lo ocurrido ni sobre un plan de contingencia que garantice la continuidad del servicio ante nuevas fallas.
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